Un adulto mayor fue asesinado en medio de un lío por unos linderos

El aberrante y deplorable caso de intolerancia que acabó con la vida de Mario Antonio Zapata Tabares ocurrió en la vereda Manga Arriba, municipio de […]

Imagen de referencia para ilustrar la nota. /FOTO: ARCHIVO.

El aberrante y deplorable caso de intolerancia que acabó con la vida de Mario Antonio Zapata Tabares ocurrió en la vereda Manga Arriba, municipio de Girardota.

En horas de la tarde de ayer, este hombre, de 63 años de edad se encontraba en el sector conocido como Villa Praga realizando unos trabajos de adecuación en un predio con otras personas.

En ese momento una mujer se acercó al lugar y los increpó, así quedó evidenciado en un video. La mujer les dijo: “¡Descarados, hicieron la casa en la calle y quieren seguir comiendo!… ¡pa eso hay ley. ¡Este es el lindero!”.

Cuando alegaban sonó un disparo y Mario Antonio cayó al piso. De inmediato algunos de los presentes intentaron auxiliarlo, pero no pudieron hacer mucho. Cuando lo intentaban reanimar, la mujer que había increpado al grupo dijo: “¿Quién lo mandó?”.

Todo quedó grabado en el siguiente video, que desenfocamos porque su contenido es sensible y puede poner en riesgo la integridad de las personas que fueron filmadas:

Según el comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, coronel Daniel Mazo Cardona, el crimen “se dio por una situación de linderos. El hoy occiso estaba arrancando un poste de una cerca que otra persona había ya fijado en este punto, que, según él, le estaba invadiendo un predio de su propiedad”.

El hombre falleció a un costado de la vía principal de la vereda a causa de 8 lesiones en el pecho generadas por un arma de fuego de perdigones.

/FOTO: CORTESÍA.

La policía fue informada de la situación y comenzó la búsqueda del asesino. Momentos después, en una zona boscosa de una finca aledaña, fue capturado un hombre de 67 años de edad, señalado de ser el responsable del crimen. Al sospechoso no le hallaron el arma de fuego.

De acuerdo por lo informado por el alto oficial, la discordia por los linderos entre la víctima y el homicida venía desde hace unos 10 años.