Con el pensamiento de no dejarlo sin sus papás al pequeño Richard Maxiliano Restrepo Ayola, de apenas 15 meses de nacido, su padre, Jhon Jairo Restrepo Restrepo, lo mató luego de asesinar a su madre Iris Carolina Ayola Hernández.
Ese es uno de los detalles que Q’HUBO conoció sobre el atroz crimen que sembró luto en el municipio de La Estrella.
Antecedente: A madre e hijo los mataron con un hacha en el municipio de La Estrella.
Todo comenzó la tarde del domingo anterior, cuando Jhon Jairo convenció a Iris Carolina de ir a su residencia, ubicada en el sector La Tablaza. Luego de conversar sobre el futuro de la relación, puesto que el victimario ya había visto a la mujer con otra persona hace un mes, esta se quedó dormida, reveló un investigador que conoció el caso.
Jhon, quien cumplirá mañana 32 años en los calabozos de la Sijín, puso música a alto volumen, luego tomó un hacha que tenía en la habitación y aprovechando que la joven de 18 años se encontraba en estado de indefensión, la atacó provocándole un hachazo en la región parietal derecha (cabeza), que le causó la muerte de forma inmediata.
Fue por su hijo para matarlo
Posteriormente salió a recoger al pequeño Richard Maximiliano, que se encontraba al cuidado de unos familiares, y regresó nuevamente a la casa. A sangre fría atacó con el elemento cortocontundente al pequeño, causándole múltiples lesiones en la cabeza.
El homicida grabó con su teléfono celular el desalmado acto, además escribió con la misma sangre de Iris Carolina mensajes soeces en la piel de su compañera sentimental; además, escribió en las paredes palabras de arrepentimiento, así quedó consignado en un reporte judicial que Q’HUBO conoció.
Sobre las 6:30 de la noche, Restrepo Restrepo salió de la casa con un bolso que tenía un estampado pixelado, se montó en su motocicleta y arrancó a gran velocidad, sin importarle que en la vía se encontraban varios niños jugando.
Al celular de la madre de Jhon Jairo llegaron varios mensajes del victimario pidiendo perdón por lo que había causado, lo que levantó sospechas entre los mismos familiares, quienes se dirigieron hasta la residencia. Al llegar, encontraron el cuerpo desnudo de Ayola Hernández, por lo que aterrorizados se dirigieron hasta la subestación de Policía La Tablaza y pusieron el caso en conocimiento de las autoridades.
Desconociendo que Maximiliano había sido asesinado, la ciudadanía se volcó a las redes sociales y publicó las fotografías del pequeño y su padre para que la comunidad entregara información sobre el paradero de ambos.
A la vivienda, ubicada sobre la carrera 49D con la calle 100BB, llegaron investigadores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía a realizar la correspondiente inspección judicial. A las afueras de la residencia, tras el acordonamiento dispuesto en este tipo de casos por las autoridades, se encontraba varios habitantes de la zona.
Los investigadores movieron el cuerpo de la mujer y debajo de ella encontraron al pequeño Maximiliano. La noticia se regó en el barrio y los habitantes atacaron la residencia con palos y piedras, situación que ocasionó que la Policía solicitara refuerzos para controlar la turba enardecida.
La actitud y los mensajes fueron claves
Los mensajes enviados a la mujer y la actitud sospechosa con la que Jhon huyó de la escena del crimen cuando era visto por los vecinos, llevó a los investigadores de la Sijín de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá a declararlo como el presunto autor material del doble homicidio.
Esa misma noche iniciaron con su búsqueda de este auxiliar de transporte. Horas más tarde, sobre las 11:35 p.m., funcionarios de la Sijín y del GOES (Grupo de Operaciones Especiales) de la Policía lograron encontrarlo en zona boscosa de la vereda Salinas, del municipio de Caldas.
En sus manos tenía el celular y se encontraba viendo el video que grabó del homicidio de su pareja y su hijo. En el tórax presentaba 3 lesiones, según los investigadores, Restrepo Restrepo intentó acabar con su vida.
El hombre fue llevado a un centro asistencial y luego de ser atendido, fue judicializado por feminicidio agravado y homicidio agravado. Jhon Jairo aceptó su responsabilidad y fue cobijado con medida de aseguramiento en centro carcelario. Ahora deberá esperar una nueva audiencia para conocer los años que deberá pasar en prisión; por lo que hizo podrían sentenciarlo a la máxima condena que permite la legislación colombiana: 60 años.