A esta familia la habrían matado por una deuda de droga de 3000 millones de pesos

Sobre las 5:00 de la mañana del 3 de septiembre de 2019, en el kilómetro 62 de la variante de Caldas, a la altura de […]

De izquierda a derecha: Mariana Burgos, Mónica Pineda, William Montes y Johana Henao. /FOTOS: ARCHIVO.

Sobre las 5:00 de la mañana del 3 de septiembre de 2019, en el kilómetro 62 de la variante de Caldas, a la altura de la vereda Pan de Azúcar y a un costado de la vía, fueron hallados los cuerpos de un hombre y una mujer envueltos con cobijas y bolsas.

Horas más tarde, casi a las 12:00 del mediodía, otro doble homicidio estremeció al sur del Valle de Aburrá. En vía pública del barrio Campo Alegre, de La Estrella, fueron encontrados los cadáveres de 2 mujeres igualmente envueltos con cobijas y bolsas.

Una persona avisó a las autoridades sobre la presencia de los cuerpos. /FOTO: ARCHIVO.
/FOTO: ARCHIVO.

En su momento las víctimas no pudieron ser identificadas y los peritos judiciales tampoco pudieron determinar la causa de su muerte. Días después, las autoridades establecieron que respondían a los nombres de Johana Andrea Henao Pulgarín, William Montes García, Mónica María Pineda Parra y su hija Mariana Burgos Pineda, de 26, 60, 45 y 26 años de edad, respectivamente, todos integrantes de una misma familia.

En medio de las investigaciones, las autoridades descubrieron que las víctimas habían sido secuestradas entre el 1.° y 2 de septiembre por delincuentes de una organización criminal que delinque en el oriente de Medellín, fueron conducidos hasta una vivienda del barrio Enciso y allí torturadas y baleadas.

“La investigación permitió conocer que un sujeto, desde la ciudad de Cali, habría actuado como determinador del caso, contratando miembros del grupo delincuencial los Conejos para que ejecutaran el secuestro, la tortura y los asesinatos de dichas personas”, aseguró la directora Seccional de Fiscalías de Medellín, Hilda Mary Rengifo.

Los mataron por dinero

El múltiple crimen estaría relacionado con la desaparición de 3000 millones de pesos, dinero que presuntamente iba a ser destinado para la compra de cocaína en la costa Atlántica en julio del año anterior, detalló la fiscal.

En el proceso investigativo, adelantado por la Policía Nacional y la Fiscalía, encontraron que el grupo familiar se había desplazado desde Pereira a la capital de la montaña por razones que son materia de investigación, informó el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, brigadier general Eliécer Camacho Jiménez.

Días después fueron privadas de su libertad. En dicha labor también descubrieron la presunta participación de 12 personas en los asesinatos, residentes en Medellín y Cali.

2 de ellas fueron ultimadas, sin embargo, las autoridades lograron capturar el pasado 15 de octubre a Alex Arbey Serna Restrepo, alias Coco; Juan Fernando Restrepo Ochoa, conocido como Banano; Julián Andrés Vargas Jaramillo, reseñado con los remoquetes de Juan Diablo o Juan de Dios; Junior Alexánder Ibargüen Rivas, apodado Junior; Miguel Ángel Hernández Agudelo, conocido en el mundo del hampa como Gordo Migue; Nadier Mayo Ceballos, Nandier; Alejandro Arias Ramírez, la Chinga, y Santiago Londoño Vargas, Narices.

/FOTO: CORTESÍA.

Estas personas fueron judicializadas por los delitos de homicidio agravado, tortura agravada, secuestro agravado y porte ilegal de armas de fuego de defensa personal, todos los delitos en concurso homogéneo y sucesivo. Ninguno de los investigados se allanó a los cargos y fueron enviados a la cárcel por orden del Juzgado 29 Penal Municipal de Medellín, con funciones de control de garantías.

“Con la misma medida restrictiva de la libertad fueron afectados el presunto determinador del homicidio colectivo, Óscar Marino Calle Perdomo, de 39 años de edad, y Esteban Felipe Yepes Berrío, ambos capturados por el CTI en la ciudad de Cali (Valle del Cauca)”, informó la Fiscalía.

¡Tremenda perla!

Las autoridades descubrieron que Calle Perdomo posee una condena pendiente de 30 años de prisión por el secuestro de un menor de 12 años, ocurrido el 26 de abril de 2000 en Cali. También encontraron que “para evadir la acción de la justicia, el hombre habría obtenido una cédula falsa nombre de Andrés Mauricio Correa Londoño”, aseguró el ente acusador.