Medellín aún tiene su territorio rock

La comuna 6 conserva sus orígenes que llegaron del campo

20 de febrero de 2025
Q'HUBO Edición 7000

Se hace raro ver en las nuevas generaciones el uso de las pronunciadas crestas, las botas platineras y las chaquetas de cuero ceñidas al cuerpo. Más raro aún que sea una comuna de Medellín la que conserve esta cultura, acompañada de otros exponentes artísticos a quienes se les nota su amor por el barrio.

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De origen campesino

La comuna 6 se fue conformando en las décadas del 60 y 70 gracias a aquellos obreros que llegaron del campo en búsqueda de oportunidades en la capital antioqueña.

Gracias a esos antepasados, barrios como el Doce de Octubre, Pedregal y Picacho, conservan esta esencia campesina. “A partir de ahí nacen características especiales en la comuna 6. Se puede decir que este territorio es aún un nicho del punk y del rock. Contamos con pelaos artistas que tienen sus bandas musicales y se destacan en esta industria”, explica Carlos Enrique Sánchez, antropólogo y director del Colectivo Cartografiando.

Carlos también es residente del Doce de Octubre y un enamorado de su sector. “La alegría que tiene este barrio tiene un significado muy especial para mí. Aún en la comuna somos un pequeño pueblo donde encuentras las relaciones cara a cara y las personas que se tratan como iguales, se quieren y se respetan”.

Diversidad cultural

El territorio tiene una riqueza representada en sus espacios culturales y gastronómicos. “En las calles puedes encontrar las cremas y paletas caseras; papitas, empanadas, pasteles de pollo, etc. Todo con ese toque campesino porque tenemos una culinaria que aún respeta la esencia del campo”, agrega el antropólogo.

En esas alturas del noroccidente de Medellín podemos revivir aquellos tiempos de una ciudad que se iba formando a través de los valores y de algo tan simple, pero tan escaso: la empatía entre vecinos. Acá sí podemos hablar de un territorio que nos representa.

Líderes barriales trabajan para que el cerro El Picacho, que oficialmente pertenece al corregimiento de San Cristóbal, siga siendo respetado como una joya medioambiental. “El cerro, para nosotros, pertenece a la comuna 6”.

El metrocable fue clave en los cambios de la comuna

Gran parte de la transformación del territorio se dio gracias a la Línea P del metrocable. “Estas obras marcan el futuro de la comuna y de los otros barrios populares. Se comprueba a través de estudios y textos que 10 años después de la construcción de este tipo de obras, hay gente que se va y otra que llega, debido a las ofertas de vivienda y de negocio que puede ofrecer el barrio”, dice Carlos Enrique Sánchez.

Tanto el profesional como los residentes de la comuna esperan que el sector cultural se mantenga en un futuro y que la 6 sea un epicentro de oportunidades para los artistas en cualquier área.